La saga de Brek Zarith consta de tres álbumes: La galera negra, Más allá de las sombras y La caída de Brek Zarith y plantea el primer arco argumental decente de la serie de Thorgal. Y es que decir "decente" es decir poco en una historia que se adentra en terrenos conocidos pero también escabrosos y donde Thorgal no siempre es capaz de superar las adversidades.
Después de las aventuras y el rapto de Aaricia en Los Tres ancianos del País de Arán, la pareja se establece en un pueblecito sin nombre de campesinos. Allí esperan el día en que Aaricia dé a luz a su primer hijo. Pero parece que los dioses no les son muy propicios pues la relativa paz queda interrumpida por culpa de los celos y las malas artes de una adolescente enamorada de Thorgal. En los consecuentes volúmenes de la saga veremos como un cataclismo traquetea la feliz vida de nuestro héroe y como por primera vez este no ve salida por ningún lado, de manera que la valentía, la fuerza y en definitiva la heroicidad que normalmente hacía gala quedan en nada. Sólo la ayuda y los remordimientos de la joven enamorada mantienen en Thorgal con vida.
La saga de Brek Zarith es compleja pero no abandona nunca el tono heroico de las anteriores historias. Son tres álbumes muy diferentes entre sí: Mientras que en el primero predomina - otra vez- la separación de los dos amantes y el intento de Thorgal para reunirse con Aaricia, después de ver cómo el guionista Van Hamme prepara el mejor final de la serie hasta ahora, comprobamos que el segundo álbum, Más allá de las sombras tiene un trasfondo muy pesimista y depresivo donde Thorgal es poco más que un trotamundos sin alma que vaga por las calles. Pero Más allá de las sombras también es la parte de la historia más mística, más fantástica de la saga de Brek Zarith, donde personajes como el Destino y otra vez los mundos fantásticos que nos rodean, invisibles, cobran protagonismo y dejan para el tercer álbum, la resolución heroica que todos esperamos.
Quiero volver a repetir que si una cosa me ha gustado de este arco argumental es que vemos cómo Thorgal no puede superar los obstáculos a solas, el cual tiene que pedir ayuda e incluso sobrevivir a base de la astucia de otros, no de la suya propia. Así pues, la infalibilidad de sus decisiones desaparece. Este hecho, paradójicamente lo hace más próximo, más humano - por muy extraterrestre que sea- y además proporciona emoción a unos argumentos muy trabajados y que empiezan a guardarse incógnitas. En el tercer álbum, La caída de Brek Zarith, el señor de la fortaleza, uno enigmático anciano, muy perspicaz e inteligente experimenta sobre la esencia de un nuevo personaje del cual quiere extraer sus secretos mejor guardadats, unos secretos, unos poderes que se convertirán en muy importantes en las futuras entregas de la serie.
Y con respecto al dibujo, el talento de Rosinski continúa adelante, perfeccionándose cada vez más, ofreciéndonos lo mejor de la línea realista del cómic europeo. En definitiva, una memorable saga de tres álbumes que abrirá el hambre a los que hasta ahora podían parecer más escépticos en cuanto a las aventuras de Thorgal.
Eloi Puig, 05/07/08
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