El primer álbum de Thorgal - La Maga traicionada- vio la luz en 1980. Van Hamme y Rosinski se propusieron un reto complejo: Unir en una misma línea de aventuras diferentes personajes y géneros pero dodas ellas protagonizadas por un heroe a la vieja usanza: Thorgal Aegirson, un joven adoptado en su momento por los vikingos pero con un pasado que es una incógnita. El ambiente donde transcurrirían las aventuras de Thorgal, sería una época pretérita sin definir, pero supuestamente en pleno apogeo de los viajes vikingos, antes del año 1000 de nuestra era, en un principio en las heladas tierras escandinavas, pero más adelante se irían añadiendo nuevos escenarios exóticos, conflictos y elementos que normalmente no son considerados dentro de la fantasía heroica.
El dibujo de Rosisnki es la mejor presentación de los álbumes de Thorgal, realista, lleno de color y con una capacidad fantástica para integrar movimiento y expresividad. Sin embargo, en este primer álbum el dibujo todavía posee algunos rasgos sencillos y colores planos. Es elaborado pero le falta alguna cosa que suponga una diferencia. No es hasta el segundo volumen donde podemos ver crecer en Rosisnki como dibujante, perfeccionando el estilo y el detallismo.
Lo primero que llama la atención de La Maga traicionada es su comienzo, con Thorgal, un guerrero con un pasado oscuro, a punto de morir en manos de Gandalf el loco, jefe supremo de los vikingos del Norte. No es un principio normal, es un desenlace de una historia que se nos esconde pero que podemos adivinar a través de los diálogos. Van Hamme tuvo cuidado de engancharnos al mundo de Thorgal desde un buen comienzo, en su más que probable muerte a manos del padre de su querida Aaricia. Un planteamiento valiente que pretende conectar con el lector de forma inmediata sumergiéndolo en unas escenas tensas y dramáticas. Pero la llegada de una misteriosa guerrera peliroja liberará a Thorgal de su cautiverio con una sola condición: Que éste sea sometido a vasallaje incondicional durante un año. A raíz del nuevo status de casi esclavo, Thorgal tendrá que realizar algunos trabajos sucios que llevan a preparar una venganza largamente preparada por la maga Slive.
Éste es el argumento básico de este primer álbum. Una historia con un inicio impactante que más adelante se convierte en un arhumento no muy trabajado pero que permite conocer algunos de los personajes y de sus caracterizaciones: El heroísmo innato de Thorgal, la belleza y el amor de Aaricia o el talante arisco y poco solidario de su padre, Gandalf el loco. Y la presentación de Slive, una incógnita creada por Van Hamme pero que en este primer volumen no encuentra su sitio. Parece que el guionista no sepa cómo hacerla evolucionar. Eso se evidencia después que Thorgal y Gandalf el loco luchen juntos y seguidamente se produzca una cierta ruptura argumental propiciando un final rápido y demasiado senzillo con una Slive poco creíble.
De hecho, el primer álbum contiene a continuación una aventura corta de Thorgal titulada "Casi el paraíso" y que no está ubicada cronológicamente dentro de la serie. En "Casi el paraíso" asistimos a una aventura mágica donde nuestro héroe tendrá que escoger entre quedarse a vivir en un lugar de ensueño con dos bellas anfitrionas y vivir para siempre o volver al mundo real. Es una buena aventura complementaria que debería de ser presentada como transcurrida unos años antes de los hechos del primer álbum pero que en este momento no cuadra con el guión principal. Así pues, vemos un abismo argumental muy pronunciado entre el final de La Maga traicionada y el comienzo del segundo álbum.
Decía antes de que Van Hamme parecía no tener demasiado claro todavía el papel de la maga Slive. Y así es: En La Isla de los mares helados (1980) nos introducimos en un breve periodo de paz, posterior a los hechos del anterior volumen, donde Thorgal y Aaricia están a punto de casarse. Desgraciadamente un guerrero enmascarado secuestra la prometoda en el último momento y se la lleva hacia los territorios inexplorados del norte helado. Thorgal y unos cuantos vikingos irán tras suyo para liberarla.
Es este un significativo segundo volumen es donde Van Hamme proporciona los primeros elementos de ciencia-ficción de la serie. Y están bastante bien construidos pero el argumento se resiente de un anterior álbum donde los hechos y las motivaciones de Slive no llegan a ser lógicas vistas las implicaciones de su secreto. Es un segundo volumen más vivo, mejor dibujado y con un trasfondo contundente. Entenderemos aquí el origen de Thorgal y de su biografía particular. Una vida que eleva -si se puede todavía más- su condición de Héroe. Quizás Van Hamme improvisó con el material que tenía de La Maga Traicionada o quizás allí no supo definir mejor el papel de Slive, lo cierto es que con el final de La Isla de los mares Helados se abren diversas puertas a Thorgal para continuar buscando su origen mientras se aventura por la mitología nórdica de los vikingos.
Unos inicios pues con momentos impactantes y de otros poco desarrollados pero que ciertamente, acompañados del magnífico dibujo de Rosisnki nos dejan con la miel en los labios para saber cómo continúan las aventuras de nuestro Héroe.
Eloi Puig, 30/04/08
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