Los miembros de la TerBi, La Tertulia de Ciencia-Ficción de Bilbao fueron los encargados de escoger las obras de esta antología publicada por la AEFCFT (Asociación Española de Fantasía, Ciencia-Ficción y terror), unos relatos que comparten un denominador común: Fueron publicadas durante el 2005 en diferentes revistas, ya sean de papel o virtuales. Los resultados son bastante interesantes, obviamente hay una mezcla bastante heterogénea de relatos que tocan los tres grandes géneros fantásticos: La ciencia-ficción, la fantasía y el terror. La elección ha sido bastante acertada.
El primer relato que nos encontramos es un claro homenaje a Isaac Asimov con el cuento "La Quinta ley" de Elia Barceló. Un cuento distendido, bien llevado, con toques sentimentales y como decía homenajeando las tres leyes de la robótica postuladas por el buen doctor. Barceló se desahoga explicándonos la historia de una relación de amistad entre un hombre y su androide. Una historia sincera que vive de nostalgia pasada con final trágico incluido.
Seguidamente me he vuelto a topar con el talento de la granadina Luisa María García en "El Ángel oscuro", una escritora de la cual ya había leído una entrañable historia en la antología Visiones 2006, "El coche rojo" y que en esta ocasión nos presenta un original relato de terror donde nada es lo que parece y con un final digno de cualquier historia de suspense. Una joven pareja que acaba de comprar una casa descubre un diario que explica hechos trágicos y misteriosos. A partir de aquí la imaginación de la autora se mueve entre la razón y la imaginación de los protagonistas mientras incorpora poesías y párrafos de estilos cambiantes que sinceramente me han atraído mucho. Quizás se hubiera podido pulir algo el argumento en algún momento para hacerlo más redondo pero la obra en sí es lo que me esperaba de una buena historia de misterio.
Uno de mis relatos preferidos es "Sushi" de Marc Rodríguez o como escribir un relato de terror corto, original y sin abusar de seres sobrenaturales. Uno de los mejores cuentos de terror psicológico que recuerdo, precisamente debido a su sencillez. La mente de nuestro protagonista le empieza a hacer malas pasadas cuando se pone a pensar si su pareja que está a su lado supuestamente durmiendo está muerta o no.
En cambio "El Deudor" es una paranoia fantástica que no me acabó de agradar. Humor negro y mucho de surrealismo son las bases para un relato original pero que necesitaría un final también del mismo estilo y no tan arreglado. Sergio Gaut Vel Hartman es el autor de la historia de un hombre al que poco a poco le van arrancando los órganos del cuerpo a causa de una deuda misteriosa. Como decía, el argumento es curioso y está bien narrado pero quizás me esperaba algo más distinto.
"Ambrotos" es el nombre de una especie alienígena y telépata que cohabita con un náufrago en un remoto planeta. El cuento pretende enternecernos mostrándonos esta simbiótica relación (el monstruo procura alimento al humano y éste le hace compañía) hasta que un rescate cambiará para siempre el modus vivendi de los dos amigos. La reacción de los rescatadores la encuentro fuera de contexto (hay que decir que parece que la historia esté ubicada en un trasfondo de space opera del cual no te explican demasiado pero de lo que al autor incorpora aquello que le interesa). No me ha acabado de gustar aunque se lee bastante bien.
Un ejemplo del género fantástico lo tenemos en"Los Olvidados de Dios", una mezcla de apocalipsis religioso y humor negro con toques argumentales bien encontrados pero con un final un poco insulso con moralina encubierta que desvirtúa alguna de estas buenas ideas de las que hablaba. Se trata del fin de los tiempos donde las hordas de Dios bajan para cumplir el Juicio Final. Claro que el primer mundo cree que todavía no es la hora y prefiere hacer pactos curiosos con los angels y arcangels. Como decía la idea no funciona a pesar de brillar por momentos.
Una de las más macabras y también surrealistas historias que encontremos en esta antología es sin duda "No me miren" de Gabriel Mérida donde un par de investigadores tienen que buscar al responsable de una muerte en un banco de cultivo de órganos. También tiene alguna concepto inquietante y bien encontrado, enfocado más hacia el terror fantástico, pero su estructura y su final ambiguo no me convencen.
Y llegamos al cuento hard de este Fabricantes de Sueños 2006. En este caso escrito por Víctor Conde y titulado "La invariante CHON". Bien, no he entendido ni la mitad del cuento, cosa que hay que tener en cuenta al leer esta reseña. Sí, la base principal, el estudio de una cultura que tiene que ser "examinada" para ver si cumple los requisitos para entrar a formar parte de una especie de Federación o conjunto superior de razas sí que lo entiendo, pero los intringulis científicos que nos expone Conde se me escapan. Supongo que otro público más avezado a la ciencia-ficción más dura lo disfrutará más. En todo caso, sí que he encontrado que la prosa del autor es fluida y ágil y que sinceramente me ha resultado agradable... pero el contenido es demasiado espeso para mí. Quizás me hace falta una segunda relectura.
En cambio "La biblioteca de Alejandría" lo considero probablemente el mejor cuento de esta recopilación... una historia que se mueve a caballo de la ciencia-ficción más refinada y que resulta sencillamente memorable. Fernando, un erudito que vive en el Perú del siglo XVIII colonizado por los españoles, vive una aventura fantástica cuando es enviado aparentemente al pasado y conoce una cultura indígena única. Pero también tengo que decir que a medida que leía el cuento tenía un sentimiento de déjà vu muy poderoso. Y efectivamente 10 o 15 páginas antes de finalizar el relato ya sabía como acabaría. A la mente me vino un episodio de la serie Star Trek la Nueva Generación que había visto recientemente que tiene una base argumental idéntica - cambiando obviamente nombres y lugares. Y así es, el capítulo 125 de esta mítica serie, titulado La Luz interior nos mostraba un argumento igual que en el expuesto en "La biblioteca de Alejandría". Hasta el punto que las últimas páginas cada vez que leía lo que le pasaba a Francisco, veía la imagen del capitán Picard. En fin, no se hasta qué punto Carlos Abraham se ha inspirado con este episodio para escribir su relato o hasta qué punto todo ha sido casualidad, lo cierto es que una cosa no quita la otra y el estilo pausado, metódico pero brillante de Abraham me han encantado. Una prosa magnífica para un argumento, al menos por mí, conocido.
Y ahora pasamos a la acción, a la ciencia-ficción alejada de utopías o de contactos extraterrestres para fijarnos en un relato al más estilo ciberpunk: violento, donde se retrata una civilización decadente, corrupta y desesperada. Su título es "Final" y lo firma Ezequiel Delutri. El argumento no es ningún hito de originalidad pero la prosa viva y rompedora de Delutri ayudan a que ésta cuaje en nuestra mente. Las últimas horas de vida de un hacker de altas esferas es la premisa por donde se mueve el autor para descubrirnos lo peor de este mundo oscuro, podrido e impersonal donde los implantes artificiales corren por cada cuerpo y donde la ley del más fuerte es la que manda. Divertido y muy entretenido.
Otro gran hallazgo es "Ulysses" de José Ángel Menéndez. Una precisa y bien planeada historia sobre robótica que me ha parecido de lo mejorcito de la antología. En este caso, el protagonista es un robot diseñado para combatir que después de 24 años de servicio ha aprendido a subsistir a las misiones. Un muy buen relato sobre inteligencia artificial, escrito al detalle y con una prosa serena y que te rodea de forma magnífica. Muy bueno.
"Tiempo muerto" es un cuento poco original sobre el típico reloj que puede detener el tiempo. Hemos leído otros por el estilo y éste no es mucho mejor. Sí que es verdad que tiene un final más que decente pero que no concuerda demasiado con lo que pasa en su interior. Da la sensación que hay un poco de paja, a pesar de la brevedad del cuento.
Y finalmente, llegamos el cuento más largo, "La traición de Judas", otro reencuentro al ciberpunk que durante buena parte de sus páginas me ha parecido que releía las aventuras de Mârid Audran a la trilogía Ciberpunk ochentera escrita por George A. Effinger . No es ninguna crítica, me lo pasé bastante bien leyendo aquellas aventuras y las que nos narra Joaquín Revuelta no son menos interesantes. Pero como no tenía suficiente con hacernos pasar un rato agradable inmersos en viejos clichés de los barrios bajos, Revuelta nos ofrece una argumento más profundo, quizás más en la línea de novelas como Carbono Alterado. El problema es que dedica pocas páginas a esta nueva situación que crea para dar un vuelco más original al realto y no todos los aspectos argumentales quedan claros. En todo caso, una loable aproximación al ciberpunk, mejor escrito que "Final" pero sin tanta fuerza en su prosa, probablemente por haberlo dotado de un argumento más trabajado.
Eloi Puig, 31/03/08
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