LA GUERRA DE CALIBÁN
Caliban's War
(2012)

James S. A Corey

Editorial:
Ediciones B
(2017)

Colección:
Nova

Núm: ---

Serie:
La Expansión / 2

Páginas: 638

Traductor:
David Tejera

Cuando en diciembre de 2016 me acabé de leer El despertar del Leviatán, el primer volumen de la saga The Expanse (La Expansión) me prometí a mí mismo que intentaría seguirla tan pronto como la editorial Nova fuese publicando volúmenes. Pero no fue así, y eso es culpa mía y de la excelente serie homónima que ya por aquellas fechas estaba viendo. Cometí el error de ver la segunda temporada de The Expanse antes de leer la novela y eso me frenó para comenzarla dado que tenía muy fresco el argumento y los personajes.

Sea como sea, casi un año después de que saliera este segundo volumen, La Guerra de Calibán, me he puesto a continuar la saga con energías renovadas ahora que la segunda temporada de la serie me queda lejos. ¿Y sabéis qué? He hecho bien pues aunque la mayoría de escenas y eventos obviamente los tenía más o menos presentes gracias a la adaptación televisiva, el hecho de leer la novela meses más tarde me ha hecho disfrutarla tanto o más como si no hubiera sabido nada de la trama.

Una criatura misteriosa ataca al mismo tiempo los soldados de la Tierra y de Marte que patrullan de forma permanente y siempre tensa en la luna Ganímedes. El resultado es un conflicto entre las dos naciones que se extiende como la pólvora (o mejor, como los haces de luz láser) por todo el Sistema Solar. La guerra está a punto de estallar y mientras algunos políticos intentan detenerla, otros parece que la instiguen. En medio de todo ello encontraremos la soldado marciana Bobbie, única superviviente de la escaramuza con el monstruo, el botánico Prax que busca desesperado a su hija desaparecida durante la batalla en Ganímedes y la grandiosa Avasarala, la abuela más mal hablada del sistema pero con poder suficiente para dar la vuelta al curso de los acontecimientos.

Y es que La Guerra de Calibán aporta más información sobre la protomolécula que parece empeñada en destruir la vida de nuestro Sistema Solar (al menos tal como la conocemos hoy en día), nos ofrece escenas de acción, de grandes diálogos, profundiza en la vida privada los tripulantes de la Roci -especialmente Holden- y nos abre las puertas a los nuevos personajes mencionados: el científico Prax, la sargento marciana Bobbie y muy especialmente la diplomática Chrisjen Avasarala. Ay! Esta última es lo más acertado que los autores se han sacado de la manga para esta segundo volumen. Aunque en la mente me lleva a visualizar el papel de la actriz persa Shohreh Aghdashloo en la serie, la personalidad de esta sub-secretaria de la ONU no se desmerece nada en la presente novela y se come a cualquier otro personaje de la novela. Con patatas.

Cierto es que los autores han escrito una aventura con mayúsculas que tiene de todo: Escenas repletas de acción y también mucha intriga política en torno a los despachos de la ONU. También es cierto que he detectado algunos elementos demasiado cinematográficos de las películas de acción como por ejemplo presentarnos un personaje irrelevante que gracias a su muerte los autores pueden salvar la vida de un protagonista importante. Es un elemento arquetípico de las escenas de acción cuando quieres demostrar que la cosa está muy mal y que alguien debe morir pero no te atreves a tocar a una figura importante del argumento. Pese el sacrificio de Miller al primer libro, creo que los autores empiezan a querer mucho a los tripulantes de la Roci... por ahora.

Así pues, tenemos más misterio, más intriga, más conflictos entre Marte, la Tierra y la APE (La Asociación de Planetas Exteriores) y sobre toda una bomba a punto de estallar en Venus donde el asteroide Ceres se desintegró gracias al trabajo realizado por Miller en el anterior volumen. La Guerra del Calibán mantiene pues el nivel de exigencia, refrescándonos, cómo decía, con nuevos personajes y actualizando la trama argumental para que nos mantengamos atentos a todo lo que rodea la política interna de la humanidad dentro de este pequeño sistema solar nuestro, pero al mismo tiempo abriendo grietas para que empecemos a pensar en lo que parece irracional y en lo que nuestras mentes quizás no pueden analizar. Me refiero a todo lo que engloba el ataque y reproducción de la proto-molécula que es el punto focal de toda la historia.

He disfrutado mucho de la lectura de esta segundo volumen. La editorial Nova parece que sigue apostando por la saga (y más, desde que se confirmó la renovación de la serie) y hace pocas semanas sacaba el tercer volumen, La puerta de Abbadón, por lo que esperamos que David Tejera, el traductor, sea llamado pronto para ponerse a trabajar en las continuaciones. Esta vez no veré antes la serie, tengo demasiadas ganas de disfrutar del tercer volumen.

Eloi Puig, 16/10/2018