Es de admirar la valentía
con que algunos nuevos escritores se enfrentan a su primera obra.
Uno pensaría que lo lógico sería escribir una
obra sencilla donde se reflejaran las cualidades técnicas
del autor y donde éste cogiera confianza para embarcarse
con retos más difíciles, pero Jaime Santamaría
coge como se dice vulgarmente "el toro por los cuernos"
y plantea su primera novela como una trilogía, o sea como
una historia compleja a desarrollar en tres libros. No es una tarea
fácil pues hace falta encontrar un equilibrio entre la información
que el autor nos quiere transmitir y el entretenimiento propia de
la obra, y este equilibrio hace falta repartirlo equitativamente
durante tres libros. Espero que esta breve crítica sirva
para animar a Jaime Santamaría a seguir escribiendo, indicando
los puntos fuertes y débiles de ésta, su primera novela: Sol de Otro Mundo.
Para empezar, hay que tener en cuenta que tenemos
ante nosotros una obra introductoria al universo creado por Santamaría.
La trilogía completa se titula Escena Final y nos abre las
puertas a la aventura pura y dura de los Space Opera más
clásicos: Siglos después de que una catástrofe
biológica disminuyera de manera significativa la población
de la Tierra, la sociedad terrestre se ha recuperado y empieza la
exploración seria del Sistema Solar. Pero una especie de
agujero de gusano imprevisible envía a Michael Smith, piloto
aeroespacial, a otra parte del Universo donde se encontrará
con otros humanos que han desarrollado una sociedad extrañamente
parecida a la nuestra, pero con las particulares diferencias de
su sistema solar. A partir de aquí, nuestro protagonista
pasará por diversas situaciones, algunas muy tópicas,
otras bastante innovadoras, para descubrir dónde está
y qué le ha pasado a la expedición anterior que también
fue succionada por el agujero de gusano y en la cual viajaba su
padre.
Los personajes que aparecen en la obra son relativamente
escasos, al menos los principales, de manera que el autor tiene
tiempo y espacio para describirlos y para presentarlos debidamente.
Eso se consigue en parte pero creo que habría que incidir
más en la caracterización de estos personajes principales.
Los secundarios, en cambio, con pocas pinceladas quedan mejor definidos.
El hecho que nuestro piloto perdido muestre básicamente fascinación
por el mundo que lo acoge y que casi no se preocupe de como regresar
o en sus familiares y amigos nos da la idea de que el autor ha primado
más la situación y descripción física
del planeta que los sentimientos y preocupaciones de los protagonistas.
En una obra ambiciosa como ésta no se deben olvidar los detalles
de la personalidad de los personajes... a menudo acaban resultando
cruciales para que el lector alcance la complicidad óptima
con estos y de paso con la propia novela.
Santamaría nos ofrece, pues, una combinación
de aventura y misterio, que no se verá completada hasta la
finalización de la trilogía. A favor suyo tiene la
creación de un universo nuevo, que va moldeando a su gusto
y del que nos da la información precisa para mantenernos
atentos a los acontecimientos. La trilogía parece bastante
ambiciosa y cosa muy importante: Es coherente en todo momento, de
manera que notamos cómo el autor tiene una planificación
argumental muy trabajada. Aunque espero que el autor salga airoso
de explicarnos algunos de los misterios que componen la novela,
como el hecho de la existencia de humanos en otra galaxia y la presencia
de costumbres tan parecidas a las nuestras, o los toques fantásticos
que ha insinuado en algunos párrafos.
Sol de Otro Mundo es una más que
interesante aproximación a la trilogía Escena Final a pesar de sufrir algunos problemas de ritmo: La novela es a veces
excesivamente descriptiva cosa que ralentiza su lectura. Eso en
parte es normal debido a su carácter introductorio y al hecho
de desarrollarse en un lugar desconocido para nosotros pero creo
que a veces el autor peca de querer ser demasiado metódico
en algunos aspectos mientras que olvida un poco la línea
de acción principal hasta el punto que llegas al final de
la novela y tienes la sensación que han pasado "pocas
cosas".
Santamaría ha demostrado ser capaz de
plantear y ejecutar un argumento coherente y en cierta manera cautivador,
y eso ya es mucho. La ligera falta de dinamismo, seguro se verá
reparada en la segunda parte de la novela donde se prevé
el desarrollo del verdadero nudo argumental. Poca cosa puedo recomendar
al autor, cómo no sea que se suelte más, que saque
de dentro su soltura, pues a veces parece que el argumento de tan
ambiciosa obra le arranque espacio a la fluidez de un estilo propio
que se entrevé en muchos momentos ...
Una opera prima más que
aceptable y bastante trabajada que dependiendo cómo la desarrolle
el autor en el segundo volumen, Falso poder, podría acontecer
toda una sorpresa para el fandom y un claro ejemplo de lo que son
capaces de ofrecernos los nuevos autores de los nuestro género
favorito.
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