Hola, mi nombre es Eloi Puig y nunca había oído hablar de Calavera lunar.
Empiezo esta reseña para denunciar que soy un pobre lector que el tema del cómic lo he tocado durante años de refilón. Curiosamente, cuando Albert Monteys creó —por tanto guionizó y dibujó— este emblemático cómic, hacia el año 1996, yo era un ferviente asistente en el Saló del Còmic de Barcelona (donde Monteys fue galardonado como autor revelación por cierto). Pero no me acuerdo. De nada.
Así que cuando Mai Més Llibres comentó que sacaba un cómic y que era un especial 25 aniversario... y que se llamaba Calavera Lunar... me quedé a cuadros. Me pregunté: «¿Es un cómic que debería conocer? Claro que el autor, el mencionado Albert Monteys, sí lo conocía. Y no, no porque haya seguido de cerca su trayectoria (Habré leído algunas viñetas suyas en El Jueves, eso seguro) sino porque nuestro dibujante está on fire, después de sacar por ejemplo la adaptación gráfica de Matadero 5 de Kurt Vonnegut.
Pero vayamos atrás... ¡¡¡Mai Més Llibres anunció un cómic!!! Y naturalmente, en catalán. Esto ya de por sí fue una gran noticia. El pasado año Extinció Edicions ya se aventuró a publicar un volumen del noveno arte en nuestra lengua. Y este año la editorial Finestres ha anunciado una colección en catalán de novela gráfica. ¡Eh! ¡La cosa se anima...! El caso es que tengo ante mis ojos un volumen a todo lujo de las aventuras de una Calavera lunar... dibujada por Albert Monteys en varios momentos de su trayectoria profesional. Y todo debe decirse: me ha gustado... mucho.
¿Quién es Calavera lunar? Pues es nuestro héroe. Literalmente. Quiero decir, es un esqueleto enfundado en un traje espacial y con una escafandra que le cubre la cabeza. Busca siempre ayudar al prójimo como un héroe de cómic, pero no tiene ningún súper-poder, ni habilidad especial de hecho. Pero tiene buen corazón (bueno, de aquella manera) y se prepara para ser un héroe. Monteys retrata a Calavera lunar de forma sublime en cuatro viñetas, con esa puesta en escena de un personaje inocente que siempre acaba superando situaciones inoportunas en una ambientación de ciencia ficción que invita a reír ya meditar un poquito sobre sus aventuras. Estos escenarios, plagados de extraterrestres y de maravillas propias de la ciencia ficción más soft sí que me ha recordado a otro clásico como fue Goomer de Nacho Moreno (éste sí que lo leí en su momento, era muy fan). Pero Calavera lunar tiene su propio humor negro, su propia idiosincrasia: Con la breve obra que es, enseguida ya te encuentras a gusto, no sólo con Calavera Lunar sino con los secundarios que aparecen en cada episodio: El niño bomba, el capitán Cabezudo etc. Son aventuras cortas que persiguen recrear brevemente una situación delirante sobre cómo Calavera lunar pretende ser un héroe.
Aquí Monteys se marcó una jugada maestra, al estilo Star Wars y sobre todo haciendo un homenaje a las larguísimas tiradas del cómic de superhéroes americano: Tanto las cubiertas (imitando claramente los cómics Marvel), como los vínculos a otros números (que no han existido nunca pero que tienes unas ganas locas que así sea), como la forma de recrear las ficticias cartas al director son elementos fantásticos que nos impregnan de nostalgia
Hablemos pausadamente: Calavera lunar engloba a todos los trabajos de este personaje dibujados por Monteys en 1996, 2000, 2007 y añadiendo material extra expresamente creado para este volumen. Además, el autor se ha dibujado a sí mismo prologando cada etapa del personaje y explicando los peros y contras de éstos y del porqué de todo.
La primera etapa fue el inicio de Calavera Lunar. En blanco y negro y bajo la presión de presentarla debidamente por el Saló del Còmic de 1996. Es una historieta donde se nos presenta al personaje in media res en una trifulca policial... o quizás no. Porque esta primera aventura es la número 237 (“Canallas del abismo”) donde entre otros aspectos veremos la participación de un personaje tan absurdo y divertido como puede ser el chico mina.
El segundo bloque está dedicado a historias más cortas de dos páginas dibujadas en el 2000 para una revista Cimoc y en el 2007 para la revista gallega BD banda. Son mis favoritos. Monteys se adentra de lleno en historias repletas de gags que nos afloran una sonrisa continua. Algunas de ellas desde la sencillez de guiones como el de 'Destruiré esta ciudad' (donde una muchedumbre de súper-héroes está haciendo cola para enfrentarse al monstruo de turno) o 'Me casé con un modulokiano’, con esos detalles de trasfondo que me parecen una genialidad. Otros, desde la absurdidad más extravagante (y divertida) como 'Contra la nariz del Duce' donde Calavera debe enfrentarse al fascismo representado en partes de cuerpos como Mussolini o Hitler. Hilarante. También 'La muerte del capitán Cabezudo' me parece un buen ejemplo donde el humor más negro conduce este episodio y donde comprobamos cómo Calavera también puede ser descuidado.
Cierra el bloque la aventura 'Las arenas del tiempo' con una típica historia de paradojas temporales, muy divertida. Pero los editores de Mai Més no tenían suficiente con este material traducido y encargaron a Monteys una aventura nueva, inédita, para añadir al volumen: Y ésta es la protagonista del tercer vuelco: 'Tu, jo i un ésser d’energia de Betelgeuse tres' ¿Qué le faltaba al bueno de Calavera para ser un héroe como los demás? Sí, lo habéis adivinado: ¡Un súpergrupo! Y esta aventura tratará precisamente de la creación de un grupo de superhéroes de andar por casa y de cómo se soluciona un descalabro cósmico de los gordos.
Calavera lunar es un muy buen personaje que tanto podría participar en una tira cómica o tener una aventura de 25 páginas. Da igual. Irradia buen rollo y el gran dibujo de Monteys logra redondear aventuras ingeniosas y sobre todo, divertidas. No sabremos si alguna vez Albert Monteys querrá seguir con las aventuras de Calavera lunar... pero me uno a los fans que piden más. Porque sólo para llenar las referencias a números inexistentes que existen, ya tendríamos para un segundo y un tercer volumen sin problemas.
Eloi Puig
12/02/2022
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