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GUIÓN
 DIBUJO |
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LOS 4 FANTÁSTICOS. de john byrne Guion |
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| Los 4 Fantásticos de John Byrne 3 |
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Continuamos la relectura del 4 Fantásticos, guionizados y dibujados por John Byrne. Este tercer volumen traerá cambios importantes en la vida del cuarteto. Vamos a ello: Podemos empezar diciendo que el autor canadiense se pone serio. O al menos todo lo serio que se puede poner en un cómic de superhéroes a mediados de los ochenta. En el anterior volumen comprobamos que sus tramas cósmicas se entrelazaban perfectamente con las domésticas y en este tercer volumen, que integra desde el Fantastic Four #269 hasta el Fantastic Four #286, además del Fantastic Four Annual #18 y #19, The Thing #19, Secret Wars II #2 (fragmento), The avengers Annual #14 y The avengers #263 encontraremos una evolución similar a los guiones que comentaba. Lo más destacable de estos números es la ausencia de la Cosa en el cuarteto. Ben Grimm, en una de sus épocas reflexivas sobre su propia naturaleza se quedó en el mundo-batalla donde transcurrieron las Secret Wars para meditar sobre sí mismo. Esto propició que Hulka entrara a formar parte de los 4 Fantásticos como cuarto componente, sustituyendo de forma provisional a nuestra querida Cosa de ojos azules. Un gran acierto por parte de Byrne porque la personalidad de Jennifer Walters (Hulka) y su optimismo, mezclado con su belleza y naturalidad contrasta muchísimo con el carácter y presencia de Ben Grimm, lo que refrescó mucho las aventuras de nuestros héroes. ¡Y eso os lo dice uno que cree que Cosa es el mejor personaje de los 4F y uno de los mejores de Marvel! Sea como sea, Hulka se integra perfectamente con todos los demás miembros del cuarteto, aunque se fijará especialmente con Wyatt Wingfoot, el amigo indio que permanece unos meses en el edificio Baxter de visita, para empezar una relación sentimental con él. Byrne, de hecho, dedica esfuerzos a presentarnos la gigante verde con capítulos llenos de dinamismo y que además, son muy divertidos. Un ejemplo es el Fantastic Four #275 (La verdad desnuda) donde Hulka debe enfrentarse a los paparazzi mientras toma el sol en topless en la azotea del edificio Baxter. Toparemos también con aventuras tópicas durante la boda de Medusa y Rayo Negro de los Inhumanos donde obviamente los 4F están invitados con resonancias de la guerra Kree-Skrull (Fantastic Four Annual #18) o por ejemplo el Fantastic Four #269 (Caído del cielo) que ocurre en territorios indios donde se enfrentarán a Terminus (Aquí vale la pena incidir en que el asesor científico de este número —algo de por sí extraño en un cómic de súper-héroes— fue el veterano escritor Larry Niven) Pero he dicho al principio que John Byrne se pone serio. Esto se traduce a que dedica algunos números a ponerse en la piel de Sue Richards y en menor medida en la de Johnny Storm. En cuanto a nuestra amada Sue, cabe pensar que acaba de pasar por un aborto y todavía sufre secuelas por la pérdida de su hija y que quiere dedicar más tiempo a cuidar al pequeño Franklin. Ella y Reed se trasladan a una casa en las afueras, suplantando por primera vez sus identidades secretas para tratar de ofrecer una vida normal a su hijo. La cosa sale mal en una aventura donde asoma el demonio Mefisto. Sin embargo, es en los siguientes capítulos donde Sue sufre más, dado que su mente se ve controlada por Psicoman, el cual le lava el cerebro y la convierte en Malicia, la señora del odio. Las torturas psíquicas que le provoca a Sue están narradas (y dibujadas) con gran maestría por parte de Byrne. Todo ello, algo muy peligroso si tenemos en cuenta que Sue es la miembro más poderosa de los 4 Fantásticos. Esto la hace sentir violada psíquicamente de una forma brutal y decide dejar de ser una buena chica... ella misma se autobautiza como 'La mujer invisible' dejando de lado, pues, el calificativo de 'chica'. Su carácter se vuelve más serio y no acepta tan fácilmente las órdenes de Reed Richards. Este episodio también pone de manifiesto problemas de racismo latente en EE.UU., de los blancos cuenta la comunidad negra, lo que evidencia una vez más que Marvel siempre está al día de los problemas sociales. Como enemigo Psicoman es siempre interesante y creo que el Fantastic Four #286 (Tormento) es uno de los mejor conseguidos (Sobre todo a nivel gráfico) de la etapa de Byrne.
Comentaba también que Byrne da algo más de protagonismo a la Antorcha Humana. Y así es: Por un lado le otorga una nueva novia. Esta vez más especial que nunca, pues se trata de un personaje de todos conocido. Las aventuras doméstico-galácticas vuelven a plasmarse a la perfección con lo que empieza a parecer un culebrón pero también una serie de decisiones muy adultas que le otorgan mayor carácter a Johnny Storm. El hecho más impactante, sin embargo, se da en el Fantasic Four #285 (Héroe), un episodio especial dedicado a la Antorcha humana donde un chaval admirador suyo se prende fuego voluntariamente para parecerse a él. Posiblemente uno de los números más serios de la historia de Marvel donde Byrne, suponemos, pretendía avisar a los lectores de que no intenten ser como sus héroes de la viñeta. Duro e impresionante como rara vez se ha visto en la Casa de las ideas. Este volumen es muy diverso, y dejando de lado la incorporación de Hulka y los problemas de pareja y familia del cuarteto, nos encontramos con un Fantastic Four Annual #19 (Llamadas desde las estrellas) cargado de nostalgia (enlaza de forma directa con una de las aventuras que me fascinaron más de pequeño: L’enfant terrible, en el Fantastic Four #24). ¡Bendita continuidad la de los guionistas! Otro hecho destacable es la destrucción (esta vez total) del edificio Baxter, obra del enemigo número 1 de nuestros superhéroes. Esto propicia que éstos tengan que ir a vivir a la mansión de los Vengadores (de donde Hulka, por cierto, acababa de marcharse). Y hablando de estos últimos, y volviendo a los conflictos galácticos, los últimos números del volumen serán otro crossover con los Vengadores... esta vez a una galaxia de distancia y muchos skrulls de por medio, algo que siempre es de agradecer. ¡Pero ah! Aún tenemos otro episodio muy especial que demuestra que los 4F estan casi siempre en medio de todo. Se trata del Fantastic Four #286 (Como un Fénix) que enlaza con una aventura previa de los Vengadores y que nos muestra una las 'resurrecciones' más polémicas de la casa Marvel, que como podéis sospechar con el título nos lleva directamente a los hechos ocurridos seis años antes (1980) en el Uncanny Xmen #129-137, o lo que es lo mismo: La saga de Fénix Oscura. Como podéis ver, un volumen delicioso, lleno de giros argumentales, nuevos personajes y apariciones de viejos conocidos. Y regado con un dibujo que Byrne perfeccionaba título tras título. Los 4 Fantásticos en plenitud de acción. Eloi Puig
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