Puntualmente, el séptimo número de Miasma (en castellano) ha salido en venta, esta vez con una selección claramente enfocada a la fantasía y el terror. La ciencia-ficción queda relegada al relato "Matemática impura". Agradecer también las cada vez más bien acabadas portadas del fanzine
"La hermandad" es un cuento que hibrida la fantasía con el terror, de argumento clásico pero que mantiene el interés en todo momento: Un grupo de personas de diferentes sexos y edades son capturadas y recluidas en una habitación. Jaume Benedito utiliza diálogos lapidarios y situaciones intensas para ofrecernos una historia más que interesante. Quizás el cuento se hubiera podido extender un poco más para reflejar mejor el terror y el ansia de los personajes, pues a veces con pocas frases no queda lo bastante evidente.
En "Yamata-No-Orochi" encontramos un relato que aporta también una buena dosis de terror psicológico sobre del único protagonista de la historia. El cuento nos sumerge en las aguas del pacífico nordoccidental para dejarnos vislumbrar el poder que se esconde en una ciudad submarina de aires lovecraftianos. Una relato que sugiere más que enseña y que juega con la locura y el miedo como elementos primordiales dentro de la caótica mente del protagonista.
"El jardín de Acónitos" es un cuento que navega entre el mundo de los sueños y la dura realidad. Coge como base una historia de muerte y desgracia para dar papel a sentimientos que muy a menudo llevamos escondidos en nuestr interior.
La ciencia-ficción queda representada en este número - cómo decíamos- por "Matemática Impura", un interesante relato entorno a ciertos postulados físicos planteado al principio de forma que se nos muestra una catástrofe de proporciones bíblicas -Valencia sufre una oleada de frío que lo acerca al cero absoluto- y que nos abre la curiosidad y la intriga sobre el causante de la tragedia. El autor entonces pasa a describir el problema pero cambiando de estilo, mediante una serie de diálogos largos y poco claros donde a veces no sabemos quien habla ni las reacciones que tienen los protagonistas. Falta según a mi entender una mayor profundidad en estas conversaciones, no tanto para explicarnos el quit de la cuestión si no para que literariamente sea un cuento más atrayente. La idea me ha gustado bastante.
"La muñeca" es el cuento más imaginativo de esta Miasma 7: Una historia fantástica sobre una niña que nace sin ser vista y que vive sin ser tenida en cuenta. Un buen ejercicio de imaginación que sin embargo no acaba de tener un final muy sólido. En todo caso pero el estilo irracional e imaginativo de la autora -que ya hizo evidente en "El Último baile de Cenicienta", publicada en el Miasma 1- me ha gustado y la animo desde aquí a continuar experimentándolo.
N. Guntes nos ofrece otro trabajado relato llamado "Último Turno". La historia juega principalmente con el terror psicológico con toques fantásticos. Un argumento perfectamente ligado nos muestra a cuatro trabajadores precarios que se quedan cerrados en una noche de tormenta en un edificio de Sabadell. A los problemas de convivencia debidos a los caracteres opuestos de los personajes se les sumarán otros de cariz sobrenatural que el autor sabe arreglar muy bien para crear una atmósfera tensa e intrigante. N. Guntes es uno de los escritores que han pasado por Miasma que más en forma me han parecido, manteniendo un nivel más que aceptable en cada una de sus propuestas.
Finalmente nos topamos con un artículo de título curioso cómo es "Augusto Darvell & Konrad Dipell... Convidados de piedra Villa Diodati", una propuesta original sobre hechos (reales o no) que pudiesen inspirar las obras Frankenstein y El Vampiro, de Shelley i Polidori respectivamente en aquella famosa noche de rayos y truenos en Suiza donde se crearon –supuestamente- las mencionadas obras o al menos su embrión. Pero el texto resulta confuso (sobre todo el dedicado al vampiro) a pesar del interés que pueda generar. Quizás la parte dedicada a Frankenstein está mejor estructurada pero con respecto a mí, me ha parecido poco comestible. Los postulados que apuntan a que las ideas originales de estos dos famosos textos no vinieron exclusivamente de la imaginación de sus autores me parecen bastantes efectivos y también vale a decir que la tarea de Óscar Mariscal para documentarse es loable. Pero repito que la estructura del texto y la sensación final de éste me ha parecido algo caótica
Eloi Puig, 18/09/07
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